Cada año cientos de adolescentes de todo el mundo deciden pasar un año estudiando en otro país. En Chile una de las opciones es la ONG AFS, líder mundial en este tipo de programas.

afs2Alice llegó a Valdivia hace aproximadamente seis meses. Con tan sólo 16 años, cargada con una maleta y una mochila. No habla español ni inglés, solamente Japonés, y por un año Valdivia será su hogar. Vino a conocer la cultura, las personas, a ir a clases y aprender español. Alice es una estudiante de intercambio, que al igual que los cientos de estudiantes de todo el mundo que deciden vivir esta experiencia, decidió dejar de lado la comodidad de su casa y su país para conocer una nueva cultura.

Hacer que las diferencias culturales sean una ventaja y no un impedimento a la hora de conocer otras realidades, y de esta forma trabajar en pos de la paz mundial, es la premisa principal de AFS (American Field Service), una organización sin fines de lucro enfocada en los intercambios interculturales de estudiantes de educación media de todo el mundo.

“Nuestros programas están enfocados en la inmersión cultural de los participantes. Durante un año o seis meses, los estudiantes viven con una familia local y asisten al colegio como estudiantes regulares. En otras palabras, son uno más de la comunidad, no son turistas, y eso hace la diferencia”, dice Loreto Álvarez, representante en Valdivia de la organización, quien viajó a Dinamarca por un año en 2004.

Cien años de historia

La historia de esta ONG nace en 1914 al alero de la I Guerra Mundial, cuando un grupo de jóvenes, norteamericanos y franceses, decidieron internarse en los campos de batalla con el fin de ayudar a todos los heridos, sin importar su nacionalidad. Luego, durante la II Guerra Mundial el grupo volvió a realizar la misma tarea, asistiendo a los enfermos sin importar su procedencia.

Una vez finalizada las guerras, los participantes se dieron cuenta que la única forma de lograr la tan anhelada paz mundial, y el entendimiento entre naciones, era por medio de intercambios interculturales en los que las personas compartieran sus culturas. De esta forma, en 1946, Stephen Gallatti, junto al resto de los conductores de ambulancias, crearon American Field Service Programas Interculturales, y en 1947 un grupo de 10 estudiantes vivieron durante un año en Estados Unidos.

En Chile, AFS llegó en 1958, ese mismo año un grupo de ocho estudiantes viajaron a Estados Unidos. “Al principio sólo existían programas de intercambio con Estados Unidos. Hoy AFS tiene una red de 50 países, y Chile tiene programas con más de 20 naciones en todo el mundo, como Letonia, Alemania, Francia, Japón, entre otros”, explica Álvarez.

Según cifras oficiales de la organización, hasta la fecha más de siete mil chilenos han vivido esta experiencia, y unos cuatro mil extranjeros han elegido Chile como destino.

De Los Ríos al mundo

A principios de agosto, aproximadamente 300 estudiantes de todo Chile comenzarán su experiencia, entre ellos, un grupo de cinco jóvenes de la región de Los Ríos se embarcarán en una nueva aventura. Los destinos: Dinamarca, Portugal, Alemania e Islandia. Los jóvenes, que tienen entre 15 y 17 años, vivirán durante 10 meses con familias anfitrionas, aprendiendo un nuevo idioma y una nueva cultura, asintiendo al colegio e integrándose a la comunidad.

“Para algunos será la primera vez que salgan del país, para otros será la primera vez que viajan solos por tanto tiempo. Algunos nunca se han subido a un avión. Lo que tienen en común todos ellos, es que son adolescentes con ganas de ver el mundo y descubrir nuevas realidades. Esta es una experiencia que te hace madurar, ser más independiente, pero a la vez, se aprende a apreciar lo que uno tiene. Es una vida en un año, y definitivamente te marca”, comenta la representante local de AFS.

Otra posibilidad de ver el mundo sin salir de la casa, según Álvarez, es recibir un estudiante de intercambio. En su caso han sido cinco y en 2014 es el turno de Stephen de Australia, quien asiste a la escuela de música Juan Sebastián Bach, y  como comenta, es un miembro más de su familia.  Este agosto, llegarán cinco nuevos estudiantes a Valdivia y a La Unión, provenientes de Alemania, Italia y Francia.

Para recibir un estudiante sólo basta con “tener espacio y desear ser anfitrión”, las familias, al igual que los colegios, son voluntarias y no reciben dinero a cambio. “Esa es la base de nuestros programas”, comenta la representante.

Durante estos días se encuentran abiertas las postulaciones para viajar en 2015, los costos van desde los diez mil dólares, con posibilidad de optar a ayuda económica o becas. Son más de 20 destinos por escoger.

Para mayor información escribir a loretalvarez@gmail.com, visitar el sitio web www.afs.cl o el Facebook: AFS Valdivia Chile

Por Michelle Carpentier