«Flamean los pañuelos al viento, al son de la guitarra y el acordeón, son los Campeones de Chile que difunden nuestra cueca campesina, fieles representantes de pura tradición».
La pareja valdiviana conformada por Carmen Cortez Rivas y Jorge Águila Molina, se coronó campeona nacional de cueca libre expresión en el certamen de cueca tradicional: «Chile canta a Chile», que se realiza en la ciudad de Rancagua. El certamen tiene la particularidad de dar a conocer la cueca autóctona y tradicional, en este caso, la que caracteriza a la Región de Los Ríos con su cultura y costumbres.
Ambos bailarines que representan la picardía y gracia de la zona campesina de la región, se midieron con parejas de todas las regiones de Chile, compitiendo con diferentes estilos y formas del baile tradicional. Por ejemplo, la cueca nortina, la sensualidad de la cueca chora, el garbo de la cueca patagónica y la energía de la cueca chilota.
La pareja plantea que no ha sido un camino fácil, ya que para poder caracterizar al hombre y la mujer campesina tuvieron que realizar una investigación y recopilación del tema que los llevó hasta el sector rural de «Ustaritz», al interior de la comuna de Los Lagos.
«Todo lo que nosotros hacemos es recopilación, investigación y un poco de proyección, pero lo más importante, es que nos reunimos con gente que vive aún en el campo. Son bailarines que adoptan el baile como su forma natural de vida», explica Carmen Cortez.
Por su parte, Jorge Águila, explica que la tradicional cueca campesina de Los Ríos, se diferencia de las otras «en la vestimenta y en la forma del estilo de baile. En el norte uno baila con ojotas, acá para el sur siempre se usan bototos o bota, porque típico que llueve y hace frío. En cambio en el norte, es caluroso y andan con ojotas o chalitas. En cuanto al baile, yo creo que para acá es más picarona la cueca campesina, hay picardía pura pura», recalca.
Conjunto Cancagual
Los bailarines que también son pareja, bailan cueca desde el año 2002. Hoy dirigen el Conjunto Folclórico Cancagual de Valdivia, el cual difunde la música y bailes típicos del campo chileno haciendo énfasis en las costumbres que se acentúan en esta zona.
Ambos campeones coinciden en que ha sido una tremenda satisfacción ser embajadores de la cueca campesina en distintos e importantes escenarios a lo largo del país. Han tenido presentaciones desde Arica hasta Puerto Montt. Ellos rescatan con esta experiencia lo importante que es «volver a tomar la autenticidad, la picardía de la china y la gallardía del varón. No es necesario hacerse un nudo en los pies para bailar cueca, si tú bailas sencillo y llegas con la gente, no se quiere más», concluye Águila.