Aguas llenas de historia y diversos paisajes naturales, son los rasgos que describen el panorama fluvial de la capital regional.
La región de Los Ríos no obtuvo ese nombre por casualidad, pues esta austral localidad de Chile posee una vasta cantidad de ríos que diariamente crean una estrecha relación entre ser humano y naturaleza.
Estas corrientes de agua se caracterizan por tener la particularidad de ser navegables en su parte baja, virtud que permite un expedito desarrollo del turismo, además de la práctica de diversos deportes acuáticos, como por ejemplo el Remo, disciplina en la cual varios clubes valdivianos se han destacado a nivel mundial.
En cuanto a la comuna de Valdivia, es necesario señalar que ésta es una ciudad que históricamente ha dependido de sus ríos; ya sea en lo económico o en lo turístico, la capital de Los Ríos le debe su desarrollo y progreso a los flujos de agua que rodean y le dan vida a la denominada “perla del sur”.
Para conocer un poco más, a continuación te mostramos los principales ríos que envuelven a Valdivia.
Río Calle-Calle: Es quizás uno de los ríos más populares de nuestro país. Se extiende desde el poblado Calle Calle hasta la ciudad de Valdivia, zona en la que pasa a llamarse río Valdivia, luego de aunarse con el río Cau-Cau. Posee una longitud de 55 km y una superficie de la cuenca sobre los 5.000 km², donde navegan embarcaciones de todo tipo y de diferentes tamaños.
Su nombre proviene del mapudungun “kallekalle”, nombre que el pueblo mapuche le dio a la abundancia de flores llamadas Libertia chilensis: planta que crece a las orillas de este río y a partir de la cual los conquistadores españoles se inspiraron para bautizarlo.
Este río se caracteriza, entre otras cosas, por albergar la “Noche Valdiviana”, evento que data desde el siglo XVI, cuando los valdivianos, descontentos con la mala administración del gobernador García de Mendoza, protestaron quemando fardos de paja puestos en botes que navegaban el río Calle-Calle. Posteriormente, el gobernador fue destituido de su cargo y la ciudadanía celebró; por ende, en la actualidad se recuerda esta manifestación social con jolgorio, adorno, luces y fuegos artificiales.
El río Cruces: Nace en las pendientes del volcán Villarrica con el nombre de San José Copihuelpi, originado de diferentes lagunas que se producen en la pendiente occidental de los cerros, entre los lagos Villarrica y Calafquén.
Es un río pequeño de las fuentes del río Valdivia, tiene una longitud de 125 km y drena una cuenca de 3.233 km². Sus principales afluentes son los ríos Nanihue y Pichoy. Se conecta con el río Calle-calle a través del río Cau-cau y converge con el río Valdivia al sur de la Isla Teja, donde, kilómetros más abajo, desemboca en el océano Pacifico en la bahía de Corral.
Desde el terremoto de Valdivia, en 1960, este sector se convirtió en un sitio favorecido para el perfecto desarrollo de flora y fauna, esto gracias a los humedales del río Cruces.
Río Cau-Cau: Su nombre tiene origen del mapudungun “kawkaw”, que significa “gaviota”. Está localizado en el lado norte de la Isla Teja, donde se enlazan los ríos Cruces y Calle-Calle; y su desembocadura es en el río Valdivia, al cual da origen.
En el denominado “Canal Cau-Cau”, al igual que en lo otros ríos que embellecen la ciudad de Valdivia, es posible observar una gran diversidad de flora y fauna, inclusive desde sus aguas podemos apreciar el Jardín Botánico de la Universidad Austral de Chile, lugar donde habitan múltiples especies de plantas.
Este río también es utilizado para el paso de embarcaciones mayores, ya que en el río Calle-Calle se encuentra el puente Pedro de Valdivia, cuya construcción no es apta para navíos de gran envergadura; mientras que por el río Cau-Cau se llega al puente Cruces, el cual posee una estructura óptima para barcos de mayor altura.
Río Cutipay: Junto al estero Estancilla y al río Tornagaleones, es considerado uno de los principales afluentes que dan vida a uno de los ríos más importantes de la comuna, el río Valdivia.
Este espacio de naturaleza se origina a partir de un humedal ubicado 3 kilómetros río arriba, en cual interactúa el bosque nativo valdiviano junto a la fauna representativa de la zona, especialmente aves como el chucao, el martín pescador, la garza cuca, el pato yeco, la huala, el huairavo, los cisnes de cuello negro, entre varias otras especies.
Gracias a su ventaja de ser navegable, en el río Cutipay se realizan rutas guiadas, las cuales se dedican a exhibir y potenciar la belleza endémica de este sector.
Río Valdivia: Es el único río de la provincia que desemboca en el océano Pacífico y su caudal –cantidad de agua de una corriente- es el segundo más grande de Chile, después del río Baker, ubicado en la región de Aysén.
Su nacimiento se debe a la confluencia entre los ríos Calle-Calle y Cau-Cau, al que posteriormente se le agregan las aguas del río Cruces; para que finalmente, en su último trazado, se sume el estero Estancilla, el río Cutipay y el río Tornagaleones.
La historia narra que el almirante Juan Bautista Pastene fue quien “descubrió”, el río Valdivia, que en aquel entonces se llamaba río Ainilebu (Ainil: río), denominado así por los indígenas que habitaban el lugar. De esta forma Pastene, enviado por Pedro de Valdivia para explorar las costas del país, re-bautizó este torrente como río Valdivia, en honor al primer gobernador de Chile.
Cabe mencionar que la región también está compuesta por otros ríos, como el San Pedro, Tornagaleones, Futa, Enco, Pillanleufu, Hueinahue, Hua-Hum, Calcurrupe, Pilmaiquén, Bueno, Lingue, entre otros. Todos con sus respectivos atractivos originarios del sur de Chile, por esta razón es necesario tomarse el tiempo y recorrer las bellezas que propone el enriquecedor paisaje de la región de Los Ríos.
Por Claudio Castro